¡Tened ánimo; yo soy, no temáis! Mateo 14:27

Al igual que nosotros en circunstancias similares, los discípulos no esperaban que Jesús se presentara de una manera inesperada e inusual. En vez de esto, esperamos que su presencia se haga sentir mientras entonamos un suave himno el domingo por la mañana en la iglesia. Esperamos encontrarlo en durante nuestro tiempo devocional. Pero tal vez no lo esperamos en el momento en que nos despiden de nuestro trabajo, perdemos un negocio u oportunidad importante, o nos metemos en un pleito grande. Pero es en las tormentas en las que el Señor hace su trabajo por excelencia, porque en ellas es cuando le prestamos el mayor grado de atención.

ST-6.-El-temor-a-los-desafios-sobrecogedores